domingo, 19 de febrero de 2012

¿Cuestionamiento?

Luego de un tiempo, cuando crees que por fin estas vacío para escribir palabras de poesía sincera y sientes que eres inmune a las ilusiones de pubertad, el camino te pone espinas para recordar los nervios que se desangran por el dolor de la herida abierta. Las emociones brotan y el corazón, ese del que hablan los poetas, sale a vivir aventuras intensas y extraordinarias.
¡La pasión para el que la quiera!, esa sincronización casi mágica que vivimos sin negar de ella, siempre queriendo mas. Y es que cuando tienes 28 años cambias, ahora lloras y ríes menos pero se siente igual o mas fuerte.
Pero, ¿Como recobrar aquellos momentos que pedías ayuda con un grito por el teléfono, sin simular la afonía? o aquel beso que no esperabas? o la algarabía al descubrir el rostro de las manos que cubrían tus ojos?.
Yo aun hablo sola, dedico canciones de amor aunque los destinatarios no se enteran (porque tengo 28 años! obviamente!), canto en la ducha (solo cuando se que nadie me escucha),  me río de los chistes repetidos, camino en forma de "L" como los caballos en el ajedrez cuando el piso posee lineas cuadradas, me creo historias de ¡superhéroe!, como por ejemplo ser un agente secreto que tomar justicia de aquellos que lastiman a los mas inocentes.
El punto es que no sé hasta que punto esto es bueno o malo. La pasión para la vida que he decidido vivir me hace dejar el corazón en la tabla para picar, hacer bobadas, cuestionarme el por qué de las cosas y empatizar con la gente y sus circunstancias.
Y bueno, aqui sigo, trabajando por la justicia!... (creo)